El Reino de Galicia en la heráldica europea
Entre los símbolos que identifican a un país se encuentran las banderas y los escudos, siendo estos últimos los que más representaciones han ofrecido a los distintos países europeos. Galicia, como realidad política, social y cultural propia desde los albores de la Edad Media, cuenta con un escudo propio desde el siglo XIII, que la distingue iconográficamente de los demás pueblos del continente. no será rollo fresco, un rollo de armas que varios autores datan hacia 1282, donde se certifica -por ahora- el primer testimonio heráldico del pueblo gallego. Por la similitud entre los términos Galicia (galicia, en francés) y cáliz (cáliz, en el mismo idioma), tal objeto de la vajilla de nobles y reyes sirve como emblema parlante de nuestro reino.
Primero se representaron tres cálices y luego, en distintas armerías, sólo aparece uno -con tapa o sin ella- y habitualmente desnudo de otros muebles heráldicos en el campo del escudo. Varios libros de emblemas certifican lo anterior, a saber: L'armorial du héraut Vermandois, Egerton Tract, Redinghoven, Lyncenich y Bergshammar. En la misma línea, pero en la variante iniciada por rollo fresco, el escudo asignado a la Roy [de] Galacia en una de las cartas capitulares del Misal de Sherborne, libro litúrgico inglés publicado no más tarde de 1407. Sin embargo, no fue hasta la primera mitad del siglo XV cuando se añadieron otros elementos al campo del escudo gallego, concretamente los tréboles trilobales. El número de ellos suele ser cuatro, como se representa en la armadura de Nancy, André Rineck y Coislin-Seguir; sin embargo, también hay varias versiones en las que el campo está sembrando estas hortalizas. En este sentido, no son sólo los códices de Juan V de Bueil y esquina de la pierna, pero también co Libro de corazón de amor enérgico, obra alegórica realizada por René d’Anjou, rey de Xerusalén, hacia 1457.
Además de esta línea de emblemas parlantes, se observan dos tendencias más en el siglo XV. Una es aquella en la que los escudos con barras de azur y oro, o de azur y plata, aluden al Rey de Galicia. Después del Concilio de Constanza (1414-1418), Ulrich von Richentals elaboró su Crónica sobre lo que pasó. En él se conservan numerosos manuscritos e incunables, en los que se reflejan un número considerable de escudos de reyes, dignidades e instituciones eclesiásticas, siendo uno de ellos el del "rey de Galicia". La otra corriente será la extendida por Pedro de Gracia Dei, "Rey de Armas" de Fernando de Aragón e Isabel de Castilla. En esta ocasión, el Faro Brigantino (o Torre de Hércules) pretende identificar a nuestro país, tal vez influenciado por la numismática de Fernando I de Portugal, rey de Galicia entre 1369 y 1371. Seamos conscientes, esta es la primera representación de nuestro emblema a nivel peninsular, tal y como aparece publicado en el trabajo Blasón General de todas las insignias del Universo (1489). Unos años más tarde el cáliz también distingue a Galicia entre los reinos peninsulares. Diego Hernández de Mendoza en su libro de armas (1497) aporta este emblema, ya plenamente extendido por Europa y vinculado al reino gallego.
En cuanto a las cruces, que serán tan características de nuestro escudo a lo largo de la Edad Moderna, será en el tapiz de Franz von Tassis, conservado de forma fragmentaria en Bruselas, donde localicemos quizás el primer ejemplar. Debía estar terminada no antes de 1519 y, a partir de esa fecha, convivirán con esta versión las demás mencionadas anteriormente, a excepción de las de los tréboles. Las armas de Galicia (catedrales, palacios, sedes de gremios…) se encuentran en diversos edificios europeos e incluso pueden verse en chimeneas, hogueras, obras de arte y libros de temática diversa. El mismo, y no sólo con una función ornamental, sino también política, estará presente en Bruselas durante la celebración de los funerales de Isabel de Castilla, Fernando de Aragón, Carlos V y Felipe II.
Héitor Picallo
Nacido en Cuntis el 18 de octubre de 1974, es ingeniero técnico naval por la UDC, aunque también escribe e ilustra.
Publica en revistas científicas como Anuarium Sancti Iacobi, Boletín de Genealogía, Heráldica y Nobleza de Galicia; Compostellanum, Conimbriga, Murguía, Museo de Pontevedra, Tapa… Salen a la luz artículos periodísticosA Nosa Terra, Diario de Arousa, Diario de Pontevedra, Galicia Confidencial, Galicia Hoxe, Luzes, Nós Diario, Sermos Galiza, Terra e Tempo… Es reconocido por algunos de ellos con los premios de periodismo Máximo Sar (2005) y Reimóndez Portela (2012).
Además de entrometerse en la literatura infantil, es autor de los ensayos: Xohán Xesús González: un precursor de la soberanía gallega (2008), con lengua en la tierra (2013), Cuntis en la época romana (2016), En la Edad Media, las castañas y las castañas como recursos económicos (2018), Las letras gallegas en caricatura (2020) mi El escudo del Reino de Galicia: una (re)visión (inter)nacional (2021). fue comisionado deO Castro es también el origen de la Literatura Infantil y Juvenil Gallega (2020).
En el campo de las bellas artes expone en instituciones como el Museo de Pontevedra, San Martiño Pinario y el MUPEGA (ambos en Compostela), el MOME (A Estrada), el Museo Valle-Inclán (A Pobra), los Museos de Artes del Grabado y Lustres Rivas (ambos en Ribeira), Museo da Guarda (Portugal), Museo Manuel Torres (Marín), Museo do Mar de Galicia (Vigo) etc. En este último colabora en la muestra de O. pergamino vindel (Octubre 2017 – Marzo 2018).
Dibujos arqueológicos suyos aparecen en publicaciones como Románico: Revista de Arte de Amigos del Románico, obras internacionales como El legado de Priscillian en el Starway (2017) de Ralf Pochadt y en libros específicos del Museo Valle-Inclán (A Pobra), institución que conserva 44 piezas originales suyas.
Algunas de sus composiciones sobre autores de la literatura gallega han aparecido en periódicos Galicia hoy y El Correo Gallego.